Vivir con un compañero de cuarto deprimido: cómo hacer frente

Vivir con otros puede ser desafiante

Llevarse bien con un compañero de cuarto puede ser un desafío a veces. Se necesita más que un poco de esfuerzo y diplomacia para resolver las fricciones naturales que se desarrollan en los arreglos de vivienda compartida. Por ejemplo, a veces puede ser difícil compartir el espacio del refrigerador, mostrar respeto mutuo por la privacidad, negociar niveles de ruido apropiados o realizar pagos oportunos de alquiler y servicios públicos.

Si su compañero de cuarto tiene depresión, eso puede aumentar los desafíos. La depresión es una afección médica que se puede tratar en gran medida. Anime a su compañero de cuarto a recibir tratamiento, desaliente los comportamientos dañinos y esté atento a signos de pensamientos suicidas. También es importante priorizar su propia salud y bienestar.

¿Qué es la depresión?

La depresión es una condición médica. Todos experimentan tristeza, falta de energía, o incluso desesperación ocasionalmente. Sin embargo, la depresión va más allá de los episodios ocasionales de "la tristeza". Se cree que está relacionado con problemas con las sustancias químicas del cerebro, llamadas neurotransmisores, que incluyen la serotonina y la noradrenalina. Estos neurotransmisores actúan como mensajeros químicos. Viajan de una célula cerebral a otra para propagar señales que juegan un papel en la regulación normal del estado de ánimo.

Si su compañero de cuarto tiene depresión clínica, puede tener niveles bajos de estos químicos. Esto puede alterar su estado de ánimo de manera incontrolable. Pueden exhibir comportamientos que tensan su relación. Por ejemplo, pueden ser hoscos, tristes, enojados, irritables, letárgicos o incluso abusivos a veces. Pueden llorar sin control, con poca provocación aparente. Pueden arremeter contra la ira. También pueden comer muy poco o demasiado, o dormir demasiado o tener dificultades para dormir.

Es importante darse cuenta de que la depresión de su compañero de cuarto es una condición médica. A pesar de la evidencia de lo contrario, es posible que no actúen de manera beligerante, agresiva, egoísta o irresponsable por elección. Pueden ser incapaces de comportarse como un compañero de cuarto ideal porque simplemente no pueden controlar su comportamiento.

¿Qué debe hacer?

En algunos casos, si la situación se vuelve demasiado difícil de manejar, muchos deciden mudarse. Debe recordar que su propia salud mental es su principal preocupación. Si decide quedarse, hay pasos que puede seguir para ayudar a su compañero de cuarto y proteger su bienestar.

Anímalos a recibir tratamiento

Si su compañero de habitación aparece regularmente ansioso, confundido, indeciso, triste, irritable o inquieto, puede estar deprimido. En lugar de criticar su comportamiento, considere alentarlos a buscar ayuda. Si se niegan, considere contactar a uno de sus familiares de confianza que pueda convencerlos de que reciban tratamiento. Las personas deprimidas a menudo no se dan cuenta, o no quieren admitir, que tienen un problema real y necesitan ayuda médica. Sin embargo, el tratamiento ofrece la mejor esperanza.

Érase una vez, las personas con depresión fueron etiquetadas melancólicas o llamadas lunáticas (ya que se creía que su comportamiento estaba influenciado por la luna). Fueron rechazados por familiares y amigos o encerrados en asilos, donde a menudo languidecían sin tratamiento en condiciones terriblemente inhumanas. Aunque nuestra comprensión actual de la depresión ha cambiado drásticamente, algunas actitudes hacia las personas deprimidas no lo han hecho.

Ahora reconocemos que las personas con depresión tienen una enfermedad en gran medida tratable. Se merecen compasión, comprensión y paciencia. Con medicamentos, psicoterapia o ambos, la depresión de su compañero de cuarto probablemente pueda tratarse. En algunos casos, pueden necesitar tratamientos alternativos, como la terapia electroconvulsiva. La atención médica adecuada puede ayudarlos a mejorar.

No lo tomes personalmente

No tome personalmente el comportamiento aparentemente antisocial de su compañero de cuarto. Por ejemplo, si no se limpian después de sí mismos o no respetan tus deseos con respecto a las tareas compartidas, no significa que intencionalmente te falten al respeto. Simplemente pueden estar demasiado deprimidos para comportarse como lo harían normalmente.

No permita el comportamiento dañino

Las personas deprimidas, especialmente los hombres deprimidos, a menudo recurren a las drogas o al alcohol en un intento de sentirse mejor. En lugar de mejorar la situación, las drogas y el alcohol invariablemente empeoran las cosas.

Una cosa es compartir una bebida amigable con un compañero de cuarto que esté sano. Sin embargo, permitir un comportamiento desaconsejado en alguien con depresión es otra cosa. Considere abstenerse del alcohol y las drogas cuando estén juntos y aliéntelos a hacer lo mismo. En lugar de proponer un viaje al bar, haga una lluvia de ideas sobre otras actividades divertidas que puede hacer mientras se mantiene sobrio.

Obtenga ayuda en una emergencia

Si su compañero de cuarto habla sobre el suicidio o amenaza con suicidarse, tome medidas inmediatas. No descarte sus amenazas como ofertas inactivas de atención. Pueden ser signos genuinos de un inminente intento de suicidio.

Prevención del suicidio

Si cree que alguien está en riesgo inmediato de autolesionarse o lastimar a otra persona:

  • Llame al 911 o al número local de emergencias.
  • Quédese con la persona hasta que llegue la ayuda.
  • Retire las pistolas, cuchillos, medicamentos u otras cosas que puedan causar daño.
  • Escucha, pero no juzgues, discutas, amenaces o grites.

Si cree que alguien está considerando suicidarse, obtenga ayuda de una línea directa de prevención de crisis o suicidio. Pruebe la Línea de vida nacional para la prevención del suicidio al 800-273-8255.

fuentes: Línea de vida nacional para la prevención del suicidio y Administración de Servicios de Salud Mental y Abuso de Sustancias

Considera tus propias necesidades

También debe ocuparse de sus propias necesidades. Asumir la responsabilidad por el bienestar de una persona deprimida requiere tiempo y energía. Recuerde tomar descansos cuando los necesite y practicar un buen cuidado personal. Por ejemplo, coma una dieta bien balanceada, haga ejercicio regularmente, duerma lo suficiente por la noche y haga tiempo para actividades que disfrute.

En algún momento, es posible que deba reconsiderar sus arreglos de vivienda. Si el comportamiento de su compañero de cuarto es difícil de tolerar y se niegan a buscar tratamiento, rechazan la ayuda de sus amigos y familiares, o no siguen el plan de tratamiento prescrito, puede ser el momento de mudarse.