9 alternativas al café (y por qué deberías probarlas)

El café es la bebida de la mañana para muchos, mientras que otros eligen no beberlo por muchas razones.

Para algunos, la alta cantidad de cafeína (95 mg por porción) puede causar nerviosismo y agitación, también conocidos como "nerviosismo". Para otros, el café puede causar problemas digestivos y dolores de cabeza.

Muchos simplemente no se preocupan por el sabor amargo o están aburridos con su habitual taza de café de la mañana.

Aquí hay 9 alternativas deliciosas al café que puedes probar.

1 Café de achicoria

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Al igual que los granos de café, la raíz de achicoria se puede tostar, moler y preparar en una deliciosa bebida caliente. Tiene un sabor muy similar al café, pero no contiene cafeína.

También es una rica fuente de inulina. Esta fibra soluble puede ayudar en la digestión y apoyar un intestino sano al promover el crecimiento de bacterias beneficiosas, en particular las bifidobacterias y los lactobacilos (1).

Además, puede estimular la vesícula biliar para que produzca más bilis, lo que puede ser beneficioso para la digestión de las grasas (2).

La raíz de achicoria se puede encontrar previamente molida y tostada, por lo que es fácil de preparar. Simplemente hágalo como café molido normal: en una cafetera de filtro, una prensa francesa o una máquina de café espresso.

Use 2 cucharadas de tierra por cada 6 onzas (180 ml) de agua, o ajuste esta proporción según sus preferencias.

Tenga en cuenta que la raíz de achicoria puede causar síntomas digestivos en algunas personas. Aunque la inulina es excelente para su salud, puede tener efectos secundarios como hinchazón y gases (3).

Además, debe evitar la raíz de achicoria si está embarazada o amamantando, ya que faltan investigaciones sobre su seguridad en estas circunstancias.

2. Té Matcha

El matcha es un tipo de té verde hecho al vapor, secar y moler las hojas de la planta Camellia sinensis en un polvo fino.

A diferencia del té verde preparable, consumes toda la hoja. Por esta razón, está obteniendo una fuente mucho más concentrada de antioxidantes: el galato de epigalocatequina (EGCG), en particular (4).

Muchos de los beneficios propuestos del matcha se atribuyen a EGCG. Por ejemplo, los estudios de observación sugieren que el consumo regular de té verde puede reducir el riesgo de hipertensión arterial (5).

El té verde también se ha asociado con una reducción de peso y grasa corporal, así como con un menor riesgo de diabetes tipo 2 (5).

Matcha tiene un sabor fresco, que algunos describen como terroso.

Preparar:

  • Tamizar 1–2 cucharaditas de polvo de matcha en un tazón de cerámica con un colador de malla fina.
  • Agregue agua caliente, pero no hirviendo: la temperatura del agua debe ser de alrededor de 160–170 ° F (71–77 ° C).
  • Revuelva lentamente hasta que el polvo se disuelva, luego batir de un lado a otro. Un batidor de té de bambú tradicional, llamado chasen, funciona mejor.
  • El té está listo una vez que se forma una ligera espuma. También puede intentar agregar 1 taza (237 ml) de leche al vapor o una alternativa no láctea para un cremoso té con leche matcha.
  • Debido a que consumes toda la hoja, el matcha suele ser más rico en cafeína que el té verde normal y algunas veces más que el café. La cantidad en cada porción puede variar ampliamente, con un rango de 35 a 250 mg por taza (6).

    3. Leche dorada

    La leche dorada es un sustituto rico y sin cafeína del café.

    Esta bebida tibia incorpora especias vigorizantes como el jengibre, la canela, la cúrcuma y la pimienta negra. Otras adiciones comunes incluyen cardamomo, vainilla y miel.

    Además de darle a su bebida un hermoso color dorado, la cúrcuma puede tener poderosas propiedades antiinflamatorias debido a la potente curcumina química (7, 8).

    Además, la pimienta negra aumenta la capacidad de su cuerpo para absorber la curcumina, al igual que la grasa. Por lo tanto, es posible que desee considerar usar leche entera versus sin grasa para esta bebida (9, 10).

    Puedes preparar una leche dorada básica en aproximadamente 5 minutos. Así es cómo:

  • En una cacerola, combine 1 taza (237 ml) de leche o una alternativa no láctea con 1/2 cucharadita de cúrcuma molida, 1/4 cucharadita de canela, 1/8 cucharadita de jengibre molido y una pizca de pimienta negra. Opcionalmente, agregue miel al gusto.
  • Calienta la mezcla a fuego medio bajo, revolviendo frecuentemente para evitar que se queme.
  • Una vez calentado, vierta la bebida en una taza y disfrute.
  • 4. agua de limón

    Cambiar su bebida matutina no tiene que ser complicado. El agua de limón es una excelente manera de comenzar el día.

    No contiene calorías ni cafeína y proporciona una amplia dosis de vitamina C.

    Como antioxidante, la vitamina C juega un papel en su sistema inmunológico y protege su piel del daño solar. Es esencial para crear colágeno, una proteína que proporciona la estructura básica para la piel, los tendones y los ligamentos (11, 12, 13).

    Solo un vaso de agua de limón, preparado agregando el jugo de medio limón (1 cucharada o 15 ml) a 1 taza (237 ml) de agua fría, proporciona el 10% de su IDR para la vitamina C (14).

    También puede agregar otras frutas y hierbas para una variedad de sabores: pepinos, menta, sandía y albahaca son algunas de las opciones populares.

    5. Yerba Mate

    La yerba mate es un té de hierbas con cafeína natural hecho de las hojas secas del acebo sudamericano, llex paraguriensis (15).

    Si está buscando un sustituto del café pero no quiere separarse de su cafeína matutina, la yerba mate es una buena opción.

    Una taza (237 ml) contiene aproximadamente 78 mg de cafeína, que es similar al contenido de cafeína en una taza de café promedio (16).

    La yerba mate también está cargada de compuestos vegetales beneficiosos que actúan como antioxidantes. De hecho, algunos estudios sugieren que puede ser más rico en antioxidantes que el té verde (16).

    Además, contiene varios minerales y vitaminas, como riboflavina, tiamina, fósforo, hierro, calcio y vitaminas C y E (16).

    Tiene un sabor adquirido, que puede describirse como amargo o ahumado. En el método tradicional, la yerba mate se prepara en una calabaza de yerba mate y se consume a través de una pajita de metal, agregando agua mientras la bebe.

    Para facilitar el consumo de yerba mate, también puede remojar las hojas con una bola de té o comprar bolsas de té de yerba mate. En estos casos, simplemente sumerja las hojas en agua caliente durante 3 a 5 minutos y disfrute.

    A pesar de los supuestos beneficios para la salud de la yerba mate, debe beberla con moderación. Los estudios han relacionado la ingesta alta y regular de 1 a 2 litros por día con el aumento de las tasas de ciertos tipos de cáncer (16, 17, 18).

    6. Té Chai

    El té Chai es un tipo de té negro mezclado con hierbas y especias fuertes.

    Aunque contiene menos cafeína (47 mg) que el café, los estudios sugieren que el té negro aún puede mejorar el estado de alerta mental (19, 20, 21).

    Los tés negros y verdes están hechos de la planta Camellia sinensis, pero el té negro se somete a un proceso de fermentación, que cambia su composición química. Ambos tipos parecen tener poderosas propiedades antioxidantes (22).

    Aunque se necesita más investigación, algunos estudios de observación han relacionado el consumo de té negro con un menor riesgo de enfermedad cardíaca (23, 24, 25).

    Además de sus beneficios potenciales para la salud, el té chai tiene un sabor robusto y un olor reconfortante.

    Hay muchas recetas, pero aquí hay una manera simple de preparar 2 tazas desde cero:

  • Aplasta 4 semillas de cardamomo, 4 clavos y 2 granos de pimienta negra.
  • En una cacerola, combine 2 tazas (474 ​​ml) de agua filtrada, una rodaja de jengibre fresco de 1 pulgada (3 cm), 1 rama de canela y las especias trituradas.
  • Lleve la mezcla a ebullición, luego retírela del fuego.
  • Agregue 2 bolsitas de té negro de una porción y deje reposar durante 10 minutos.
  • Colar el té en dos tazas y disfrutar.
  • Para hacer un café con leche chai, simplemente use 1 taza (237 ml) de leche o su alternativa no láctea favorita en lugar de agua en la receta anterior.

    7. Té Rooibos

    Rooibos o té rojo es una bebida sin cafeína que se originó en Sudáfrica.

    A diferencia del café y otros tés, el rooibos es bajo en antioxidantes de taninos, que pueden ser beneficiosos pero también interferir con la absorción de hierro (26).

    A pesar del bajo contenido de taninos, el rooibos proporciona una cantidad sustancial de otros antioxidantes (27).

    Los estudios son extremadamente limitados. Un estudio de probeta sugiere que el rooibos puede ayudar a proteger contra las enfermedades del corazón, mientras que otro encontró potencial para reducir el riesgo de cáncer (28, 29).

    Rooibos tiene un tiempo de inclinación más largo que la mayoría de los tés y el exceso de remojo no produce un sabor amargo. En cambio, el rooibos tiene un sabor ligeramente dulce y afrutado.

    Para prepararse una taza, use un filtro de té para remojar 1–1.5 cucharaditas de rooibos sueltos por hasta 10 minutos. Opcionalmente, puede agregar limón y miel al gusto.

    8. Vinagre de manzana

    El vinagre de sidra de manzana (ACV) se elabora fermentando manzanas trituradas con levadura y bacterias.

    Este proceso produce un compuesto llamado ácido acético, que puede tener efectos beneficiosos sobre la sensibilidad a la insulina y los niveles de azúcar en la sangre, según algunos estudios.

    Por ejemplo, un estudio encontró que cuando las personas con resistencia a la insulina bebían 20 gramos (0.5 cucharadas) de ACV antes de una comida, su aumento en los niveles de azúcar en la sangre se redujo en un 64%. Sin embargo, este efecto no se observó en personas con diabetes tipo 2 (30).

    Aunque todavía no hay mucha evidencia, ACV también puede aumentar la sensación de saciedad después de las comidas y ayudar con la pérdida de peso moderada (31, 32, 33).

    Una bebida AVC básica combina 1–2 cucharadas de vinagre de manzana crudo o sin filtrar, 1 taza (237 ml) de agua fría y opcionalmente 1–2 cucharadas de miel u otro edulcorante preferido.

    No tome ACV sin diluirlo primero. ACV contiene 4–6% de ácido acético que puede quemar su boca y garganta. También puede desgastar el esmalte dental si se usa regularmente, por lo que se recomienda agitar el agua antes y después de beber ACV (34, 35).

    9. Kombucha

    Kombucha se elabora fermentando té negro con bacterias, levadura y azúcar.

    El proceso de fermentación crea una colonia simbiótica de bacterias y levaduras, comúnmente conocida como SCOBY.

    Después de la fermentación, la kombucha contiene probióticos, ácido acético y antioxidantes, todos los cuales pueden tener beneficios para la salud (36, 37).

    Los estudios en animales y en probetas sugieren que la kombucha puede estimular su sistema inmunológico, mejorar los niveles de colesterol y glucosa en sangre en personas con diabetes. Sin embargo, los supuestos beneficios para la salud en humanos son en gran medida anecdóticos (38, 39, 40).

    No se recomienda hacer kombucha por su cuenta debido a un alto riesgo de contaminación por patógenos nocivos (41, 42).

    Sin embargo, existen innumerables variedades disponibles comercialmente que no presentan el mismo nivel de riesgo.

    El Punto Es…

    Si bien el café tiene muchas ventajas para la salud, puede que no sea necesariamente para ti.

    Sin embargo, hay muchas otras opciones. Muchos incluso proporcionan beneficios que el café no puede proporcionar, como hierbas y especias ricas en antioxidantes, probióticos y ácido acético.

    Si está buscando una alternativa saludable al café, vale la pena probar las bebidas en esta lista.